martes, 26 de junio de 2012

Destino

El dolor ,que se reflejaba danzando tras la visión enferma de mi aparato vital, era una muestra de mi confusión y el despertar de mis palabras fue su eco, tras esas voces difuminadas se encontraba mi camino, ya lo vislumbraba nuevamente.

¿Dónde estoy yo? No pertenezco a ningún lugar que hasta ahora haya conocido, y ¿es que acaso el ser humano  pertenece a algún sitio?

¿Estamos destinados a vagar? Yo me sentía de esa manera, tan libre y a la vez tan aislada, sin saber que podría ocurrir, que debía de hacer y en que forma tendría que reaccionar. Ésta es la verdad: no lo sé. Quisiera encontrarme con alguien que me dijera lo mismo, que después de años de vida siguiera en la posición  de un pequeño infante ante la duda enorme de nuestra procedencia y de nuestro extraño existir, cómo es que esto conlleva a una vida de preguntas.

Parecido al reflejo que emiten los lentes al contacto con las sabanas ardientes del sol, yo sentía así lo que se me dejaba percibir de la realidad. Verdaderamente tan extraña en este mundo. Día tras día continuaba, los días se  seguían sucediendo, cada uno acumulándose  en la cumbre de mi reloj, en la cumbre de mi indiferencia...  ¡No! De indiferencia no se trata, es desconocimiento, ignorancia de mi situación venidera.

Y es tal vez...  ¿Pasa lo mismo con todos? ¿Sólo siguen el día a día sin incomodarse?¿Por qué a mi me resulta tan incomodo? ¿Por qué no lo soporto?

Me parece incipiente mi expectativa a la voluntad del porvenir, a la voluntad de la humanidad.

lunes, 19 de marzo de 2012

Los vidrios del Universo


Entran por los vidrios del extraño universo, las imágenes del teatro diminuto del  sentido común. Tus señales, de espacios lejanos, transmiten la frecuencia necesaria para prender su motor cósmico. ¿Lo entiendes, puedes oír el vacio del infinito?
Mis satélites claman, han recibido tus haces de luz. ¿Lo entiendes? Somos universos distantes, que se mezclan al topar con el infinito. Mis vidrios asemejan a esferas blancas, te miran aunque las nebulosas se interpongan. Y tras miles de años luz, mis mensajes son descifrados, pues el tiempo se lleva la vida, pero jamás  mis cantos.  
¿Cuántos años llevará? Para que el cosmos nos una. ¿Somos humanos o acaso solo un alma?
¿Y que hacemos entre toda la existencia? Me pregunto a donde nos llevara la razón, quizás hasta la imaginación. Y afuera de los asteroides que me rodean, te encuentras tú. La humanidad, entre galaxias y estrellas, llega en momentos a fundirse en un solo tiempo.

jueves, 5 de enero de 2012

Abraxas

Las serpientes hermanas,
que hacen fluir  dos ríos,
del bien y el mal,
del siempre y jamás.

Por nuestras vertientes,
fluidos de rojo,
emana el demonio,
inventados en las
prestigiosas, mentirosas mentes.
Esos ríos de sangre,
simbolo de vida
y temor a la muerte.

Caminando dentro,
entre dos extremos,
acercandonos a lo dulce
y alejandonos del amargo,
yendo a la oscuridad,
dejando a la luz.

El humano parece,
dividido en dos,
debatiendonos,
con dos manos,
con dos ojos
y con dos labios.
Bailando inestables,
al ritmo de tambores,
que se tornan guitarras,
de un rojo a un azul,
del calor a la desesperación,
transitamos entre calles,
por las casas,
por las mentes,
por las piernas,
por las melodias,
siempre y nunca,
en la vida y en la muerte.

Divididos en dos
y forzados a ser uno,
nubes y cielos,
lluvias y sequias.

Dentro del cosmos,
dentro de uno,
afuera de todos,
casi sin rumbo.

A donde camines
encontraras
una linea que divide
el bien del mal.

Ricos y pobres,
paz y caos,
somos la transición,
de lo que ha pasado.
Somos lo que han dejado
y lo que vamos dando,
gritos de esperanzas,
llaqntos de dolor.

Calor y frio,
del cuerpo,
del alma,
del valor.

Formando fractales,
construyendo altares,
misticidad y la razón,
conviven en una sola voz.

Tal como la oscuridad,
ella vira a la luz,
estamos entre
dos caminos.

Somos evolución constante,
el corazón de la tierra,
palpitante,
somos esos humanos,
el bien y el mal,
conviven en nuestras entrañas,
la sintesis del pasado.

domingo, 2 de octubre de 2011

Miedo

Existe un sentimiento proveniente de las entrañas más profundas, aquellas que arden tal  como una flama inapagable. Como miedo se le ha conocido por los mortales.

El miedo implacable hace despertar del sueño al hombre, lo acecha, lo toma por el cuello, el dedo pulgar presiona firmemente hundiéndose en tu piel hasta tocar las venas, los dedos de su áspera mano aprieta tu cuello que aparenta ser arena ante su fuerza ¿lo puedes sentir? Te exilia de tu rutina para que seas empujado al sendero del sufrimiento, la muerte te canta al oído.

Tus entrañas dejan correr el veneno, mas tu pecho atemorizado se opone inamovible a ser conquistado, se sostiene firmemente de tu voluntad, de tu amor, sin embargo, el miedo es poderoso su deleite es tu debilidad. Te continua oprimiendo, es como si estuvieras atrapado en una caja de acero que se empequeñece, cada vez un poco más... sus paredes te oprimen todos tus órganos, tu cuerpo se reduce, se desploma. Tan solo ha quedado una masa, a partículas, a viento, a estrellas, a nubes, a universo.

¿Puedes verme? Mirame, justo a los ojos, besame, resguardame en tus pupilas. Dejame ser el brillo que alumbra disolviendo tu oscuridad. Permiteme vivir en tus brazos, seré tu escudo haciendo frente a la fría soledad.
Intername en tu cuerpo, hazme olvidar que existe el tiempo.

¡Corre!, ¡Vamos!, muevete, da otro paso. Llega, ven hasta aquí, te abro mi pecho, será tu hogar, entra y devora mi miedo con tu risa, hazme fuerte con tus caricias, vaguemos por nuestros cuerpos.

Construyamos un  muro que nos proteja, dentro nos encontraremos los dos. Un muro de piel, de carne, de alma, de sangre...

El miedo nos mirará con simpatía, pues sabrá que hemos vencido, lo veremos partir, lo veré con tu calor transformado en mis ojos. Solo te sentiré a ti, a mi, a ese otro que somos y no somos más, no importa nada. Tus labios son mi verdad.

martes, 19 de abril de 2011

¿Un mundo normal?


Otra vez presiento la rutina venidera que invade, que decir, mas bien ADORMECE   mi sentido, mis ganas de vivir. Un deja vu que se aproxima sin malicia alguna, se aproxima la calma, se aproxima, cada vez, hasta que ya esta viendo mis espaldas y me ahorca en su vacio amarillento. Me asfixia. Deseare huir, deseare correr y ya no regresar jamás. Sin embargo permaneceré, me mantendré quieta, haciendo lo mismo que todos los días, volviendo a mi trivialidad, por que solo es mía, mi desesperada y neurótica tranquilidad que con todo mí ser deseo aplastar. Pero no, regresa, siempre vuelve acechante, queriendo derrumbar mis momentos en los que siento, todo es sentir, llenarte de emociones, los mata y los sustituye por una tarde de TV, una comida familiar o tarea.


Después él me rescatará. Ahora lo poseo, tengo a la primera persona que me ha hecho sentir tan intensamente, que me ha sacado de este teatro de la normalidad, él ha creado un paréntesis  en todo esto, él se ha metido en mi vida y la ha hecho suya, por que es seguro que sin él mi vida sería una más, otra igual. Aun así no puedo estar siempre junto a él, me agrada pensar que lo veré al día siguiente; me agrada saber que el tiempo pasa rápido, pero nos faltan mas de estos momentos fugaces por vivir; me agrada saber que nuestros lazos se transforman constantemente, mejoran, teniendo esa seguridad de que lo amaré. 

Espectro

Las particulas brillantes
de mi alrededor toman forma,
el blanco de mi mente fallante
se transforma en realidad y persona.
Otro día ha comenzado,
es un desafio terminarlo con sentido,
me percibo entre la nada, todo callado,
no sé que sera de mí en este mundo embutido.
El negro espectro de la soledad
me hace pensar y querer correr,
escapar de nuevo de la sociedad,
no mas personas a las que entender. 
Mi defecto es no saber mi virtud,
es mantenerme en el fondo
y aun asi tener el poder de la quietud,
esta es mi soledad en la que me ahogo.

martes, 29 de marzo de 2011

Sociedad y situaciones diarias.

Siempre he estado en desacuerdo con esa rutinaria y trivial vida de casi todas las personas, pero a fin de cuentas yo caigo en lo mismo. Desde hace varias semanas que me he percibido más tímida y cerrada de lo que era antes, creo que empezará otro de mis cambios.
Por alguna razón tengo esa necesidad de cambiar, no sé cual sea mi identidad, hasta siento que mi vida es como una obra de teatro y mi personaje tiene un desorden de identidad multiple.
He cambiado de gustos, aspectos, creencias, forma de ser, y se puede preguntar ¿Qué esto no es normal? Todas las personas cambian ¿no? ¿qué es lo que te hace diferente a ellas?
Supogo que es la velocidad de mis cambios y que no tengo ninguna base, las personas cuando cambian se creen ese modelo o patrón que siguen aunque tal ves subconcientemente saben que no son así, yo no me lo creo, siento que para poder vivir con las demas personas tengo que actuar y finjir un bello personaje inventado por mi mente. ¡Y me encanta! 
Me encanta ese sentimiento de poder dejar una apariencia, de controlar los pensamientos de la otra persona, me encanta esa maleabilidad de mi ser, me encanta  poder sentir en mi cada fibra de lo que es ser totalmente contrario a lo que me gusta, de lo que realmente opino. Me encanta que cuando actuo contrario a las reglas implicitas de la sociedad "comportate" "no lo hagas, tienes que ser normal" los normales voltean a verme con cara de expectación o se rien de lo que no entienden.
Simplemente me fascina poder actuar.
Aunque por dentro este tan confundida por no sbaer como soy.